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/ revista trimestral de crítica de crímenes / número 20- julio 2007
Crítica
de crímenes
La
matanza de la Universidad de Virginia
Esther. Sobre
las 7.15 horas de la mañana del 16 de abril de 2007, Cho Seung-
Hui mató a tiros a dos jóvenes que se encontraban en la
residencia de estudiantes del campus de la Universidad Politécnica
de Virginia (Estados Unidos).
A las 9 horas remitió por correo un paquete a las oficinas centrales
de la cadena de televisión NBC en Nueva York, que contenía
diversos vídeos, fotos y escritos.
Finalmente, sobre las 9.45 horas entró en el edificio Norris Hall,
al otro lado del campus, y empezó a disparar contra alumnos y profesores.
Vestido con una versión particular del uniforme de los Boy Scout,
recorría los pasillos de la universidad intentando acceder a las
aulas donde algunos estudiantes habían hecho barricadas. Asesinó
a 32 personas y después se suicidó con un tiro en la cara.
Al lado de su cuerpo apareció una nota con una amenaza de bomba,
por lo que la policía sospecha que puede ser el autor de otras
dos amenazas de bomba que se recibieron en las semanas anteriores a la
masacre.
Tras producirse el primer tiroteo, la policía no acordonó
un campus en el que hay más de 26.000 estudiantes ni cerró
todas las instalaciones porque pensaron que se trataba de un incidente
aislado, de una reyerta entre estudiantes, ya que el asesinato de dos
alumnos y la desaparición del agresor no presentaba las características
típicas de las matanzas de colegios.
Cho Seung- Hui era un
estudiante de filología inglesa de 23 años. Algunos profesores
lo consideraban como un solitario problemático. Sus padres emigraron
de Corea del Sur a Estados Unidos en 1992, cuando el joven tenía
8 años. Se instalaron en una vivienda unifamiliar en Centreville
(Washington). Los vecinos le recuerdan como un chico retraído y tranquilo
que pasaba horas jugando solo al baloncesto. Compartía un apartamento
en la residencia de la universidad con otros dos estudiantes, a los que
apenas les dirigía la palabra.
El paquete enviado a la NBC contenía 28 vídeos, 43 fotos y
una diatriba de 1.800 palabras. En los vídeos, el joven aparece apuntando
a la cámara con una pistola y dice enfadado: "Tuvisteis cien
billones de oportunidades y modos de haber evitado esto hoy (...) Pero decidisteis
derramar mi sangre. Me obligasteis a arrinconarme y me dejasteis una única
opción. La decisión fue vuestra. Ahora tenéis sangre
en vuestras manos que nunca se quitará". El estudiante también
mostró cierta animadversión hacia los pijos, de los que dijo
que aunque tuvieran toda clase de lujos nunca estaban satisfechos.
Cho Seung- Hui fue remitido a una unidad psiquiátrica a finales de
2005, después de que contactara con dos compañeras que se
quejaron de su comportamiento. Los informes concluyeron que el joven padecía
un trastorno mental y que podía convertirse en un peligro para sí
mismo o para otros. Que tenía un temperamento depresivo, pero que
negaba tener ideas de suicidio.
Muchas de sus redacciones de clase contenían temática violenta
y episodios macabros que a sus compañeros y profesores les resultaban
inquietantes. Dos de sus cuentos trataban sobre un hijo adoptivo que mata
al padrastro con una motosierra y a martillazos y unos alumnos que matan
a un profesor que ha abusado sexualmente de ellos.
Asesinos
de masas
Hasta ahora el
mayor asesino de masas de Estados Unidos había sido George Hennard
que mató a tiros a 23 personas en una cafetería de Killen
(Texas) en 1991 y después se suicidó. Mientras que la mayor
matanza estudiantil era hasta ahora la de la Universidad de Texas, donde
en 1966 Charles Whitman mató a tiros a 16 personas y después
murió abatido por la policía.
Pero las matanzas
más famosas son seguramente la de Columbine, por el documental de
Michael Moore, y la de Brenda
Spencer, que sólo mató a dos pero tiene una canción:
"I don't like Mondays". En abril de 1999, Eric Harris y Dylan
Klebold, dos estudiantes del Instituto de Columbine (Colorado), mataron
a 13 personas y después se suicidaron. Parece ser que el coreano
se refirió a ellos en su diatriba al hablar de "mártires
como Eric y Dylan". De todas formas, a todos ellos les superó
el australiano Martin Bryant,
que en 1996 mató a tiros a 35 personas e hirió a 18 en un
bar y un hostal de Port Arthur (Tasmania).
Para convertirse en un
asesino de masas hay que matar como mínimo a tres personas en un
solo lugar. Los asesinos de masas suelen ser hombres depresivos, paranoicos
que sienten que son unos fracasados y echan la culpa de su fracaso a cualquiera
menos a sí mismos. Suelen sentir fascinación por las armas
de fuego y sólo hace falta una desgracia (como que les despidan o
les deje su novia) para cargar la munición y empezar a liquidar a
todo aquel que se les ponga por delante. El asesino de masas se va, por
ejemplo, a un centro comercial y empieza a disparar indiscriminadamente
o tiene problemas con sus familiares y, un buen día, estalla y decide
cargarse a todos los que pueda. Después, generalmente, se suicida
o sigue disparando hasta que lo mata la policía. En realidad, lo
que quieren es morirse, pero deciden hacerlo de una forma escandalosa y
vengarse de la sociedad que les ha hecho fracasar.
Deniegan
la libertad condicional a Charles Manson
Esther.
A Charles Manson le han denegado en mayo por undécima vez la posibilidad
de lograr la libertad condicional porque a pesar de su edad sigue siendo
un peligro para la sociedad. En los 36 años que lleva en la cárcel,
se ha negado a someterse a evaluaciones psiquiátricas y a participar
en programas de rehabilitación de delincuentes y, además,
no ha mostrado arrepentimiento ni simpatía hacia ninguna de sus víctimas.
No se revisará de nuevo la posibilidad de concederle la condicional
al que seguramente es el asesino en serie más famoso de Estados Unidos
hasta el año 2012.
En 1971 le condenaron a pena de muerte por nueve asesinatos, pero en 1972
el Tribunal Supremo de California derogó la pena capital, por lo
que en 1977 se modificó su condena por cadena perpetua con la posibilidad
de lograr la libertad condicional.
Charles Manson
Charles Milles
Manson era un delincuente de poco monta que pasaba más tiempo en
centros de detención que en la calle. En total, entre los 12 y los
32 años sólo estuvo libre unos cuantos meses en los que consiguió
casarse y tener un hijo. Era carne de presidio, vivía de robar coches,
hurtos, falsificaciones y pequeños atracos, hasta que le volvían
a detener y le mandaban de nuevo a prisión. Pero en marzo de 1967,
tras su última salida de la cárcel, se encontró con
un mundo diferente, un mundo lleno de hippies y drogas. En los dos años
que estuvo libre (1967-1969) consiguió montar una secta destructiva
y matar a unas cuantas personas.
Manson nació el
12 de noviembre de 1934 en Cincinnati, Ohio. Mide 1,58 metros de altura.
Es hijo ilegítimo de una niña de 16 años que con el
tiempo se hizo prostituta. Los abuelos eran unos fanáticos religiosos
a los que la niña les salió rebelde. Manson no tuvo nunca
un hogar estable. Su madre, que era también muy aficionada a la bebida,
lo llegó a cambiar por una cerveza a la camarera de un bar (un tío
recuperó al niño días después).
La madre ingresó en prisión por participar en un atraco a
mano armada, y Manson deambuló de casa en casa. Vivió un tiempo
con su abuela fanática, después lo mandaron a casa de un tío
que lo llevaba al colegio vestido de niña (como a Henry Lee Lucas),
por lo que acababa siempre pegándose con los compañeros que
se metían con él y, por último, también vivió
con otro tío alcohólico.
Entró por primera vez en un reformatorio cuando tenía nueve
años, después de que le pillaran robando. A los doce años,
tras escaparse de un centro, intentó volver a vivir con su madre,
pero ella no quiso. Con trece años empezó a atracar. Posteriormente,
lo catalogaron como homosexual y peligroso, después de que sodomizara
a otro chaval al que amenazó con una navaja. (Era muy aficionado
a violar a sus compañeros de encierro).
Cuando tenía 19 años salió en libertad condicional.
Con 20, se casó con una camarera y tuvo un hijo, Charles Manson Jr.
Pero volvió a la cárcel por robar coches, y su mujer se divorció.
En 1958 empezó a dedicarse a vivir a costa de las mujeres (y a falsificar
cheques a su nombre). En la cárcel había aprendido a tocar
la guitarra y eso siempre ha tenido mucho tirón entre las chicas.
Le volvieron a encerrar por una falsificación. En la cárcel
se pasaba el tiempo escribiendo canciones y tocando. Estaba obsesionado
con los Beatles y pensaba que si le daban una oportunidad podía llegar
a ser tan famoso como ellos. En 1967, cuando tenía 32 años,
le dejaron nuevamente en libertad condicional, y se fue a vivir a un barrio
hippy de San Francisco.
El 'Magical
Mistery Tour'
Todo empezó
cuando Charles Manson conoció a Mary Brummer en 1967. Acababa de
salir de la cárcel y se dedicaba a tocar la guitarra en una de las
escaleras de la Universidad de California para sacar unas monedas. Mary
era una licenciada en historia, una joven mojigata de 23 años, poco
agraciada, que llevaba las camisas abrochadas hasta el cuello y trabajaba
como bibliotecaria en la universidad. Se conocieron, y Manson se instaló
en su casa. (Se había convertido en un especialista en hacer caso
a chicas feas para sacarles todo lo que podía). Pero lo de tocar
la guitarra y cantar proporciona tanto atractivo a los varones que Manson
siguió conociendo a más chicas y llevándoselas a casa
de Mary. Con la primera protestó ('no me irás a meter a esa
en casa'), pero poco a poco se fue acostumbrando, y al final Manson se hizo
con un harén de dieciocho.
En 1968, Charles Manson decidió embarcarse en su 'Magical Mistery
Tour' particular, consiguió un autobús y se llevó al
harén de viaje. Decidieron echar raíces en el Death Valley,
donde se convirtieron en La Familia Manson. Las chicas consiguieron que
un señor mayor les dejara vivir en Spahn Ranch, un rancho situado
en las montañas en el que se habían rodado películas
antiguas de vaqueros. En el Rancho Mary tuvo un hijo de Manson, Michael.
Gracias a las chicas, que estaban encantadas de acostarse con quien Manson
les mandara, se dedicó a hacer contactos musicales para llegar a
ser tan famoso como los Beatles. Conoció a Gary Hinman, un profesor
de música que, a su vez, le presentó a Dennis Wilson, de los
Beach Boys, y a Terry Melcher, el hijo de Doris Day. Wilson se acabó
hartando de tener a la pandilla a todas horas en su casa. En cuanto a Melcher,
Manson pretendía que utilizara su música en una película,
pero éste no accedió.
La Familia
Manson
El núcleo central de seguidores convencidos de La Familia eran unas
25 personas, pero llegaban al centenar con los que estaban de paso. Dicen
que Manson era un especialista en captar las debilidades de la gente para
darles lo que necesitaban. Era un quinqui adulto rodeado de burgueses conflictivos,
que no habían superado la edad del pavo y estaban la mayor parte
del tiempo en ácido. Manson era una figura paternal para los que
buscaban a un padre, un amante para las chicas más feas y menos interesantes,
y Jesucristo para los que no sabían que camino seguir en la vida.
El grupo subsistía con pequeños robos y comida de los contenedores
de basura. En principio, el entretenimiento principal era el sexo, pero
poco a poco se fueron aburriendo y acabaron poniendo más interés
en los asesinatos. Manson sabía que las chicas dispuestas a mantener
relaciones con cualquiera atraían a los hombres. Por lo que, cuando
había escasez de mujeres, mandaba a sus acólitos a por más.
Muchas eran adolescentes rebeldes que se habían fugado de casa. En
la secta solía haber cinco mujeres por cada hombre. Normalmente,
Manson organizaba una orgía psicodélica a la semana con Marihuana,
peyote y LSD, y violaciones de menores incluidas. Se ocupaba de que los
acólitos perdieran sus tabúes sexuales: homosexualidad, cunnilingus,
sexo anal,...
Su doctrina era una mezcla
de interpretaciones personales de la Biblia y de las canciones de los Beatles.
Los "cuatro ángeles que sostienen los cuatro vientos de la tierra
en los cuatro confines del mundo" eran los Beatles, según Manson.
El quinto ángel, Exterminaus, él del Abismo Insondable, que
estaba por encima de los otros cuatro, era él: Charles Manson, Jesucristo.
Para Manson el Abismo Insondable era un lugar en la tierra, una civilización
que vivía bajo tierra, con fuentes de las que manaba chocolate y
árboles que daban comida. Se podía acceder allí a través
de un lago en Death Valley, pero se ahogarían en el intento y el
drenaje les salía muy caro. Así que, seguían buscando
otras entradas por el desierto.
El Álbum Blanco de los Beatles, editado en noviembre de 1968, era
una especie de libro sagrado de la Familia Manson, que contenía la
profecía de la guerra de los negros y el fin del mundo. Según
Manson, los cuatro de Liverpool sabían que el redentor vivía
en California y le enviaban mensajes con sus canciones. Manson interpretaba
las letras de "Blackbird", "Piggies", "Helter Skelter",
"I will" o "Revolution 9", a la luz de su teoría
del Apocalipsis.
Según Manson, en el verano de 1969 los negros se revelarían
contra los blancos y convertirían las ciudades en un infierno. Asesinarían
a los blancos en sus casas y escribirían palabras en las paredes
con su sangre. Al final, los negros saldrían victoriosos, pero con
el tiempo, debido a su inferioridad racial, según Manson, serían
incapaces de tomar las riendas del planeta y ahí aparecerían
el gurú y su Familia que acabarían gobernando una tierra llena
de esclavos negros. Mientras transcurría la batalla de razas, Manson
y sus acólitos pensaban ocultarse en un agujero en el desierto, lejos
de las ciudades, en el Abismo Insondable.
(Probablemente, Manson estableció su teoría por los disturbios
raciales que se registraron en Estados Unidos tras el asesinato de Martin
Luther King, el 4 de abril de 1968 en Memphis. En agosto de 1963, Luther
King leyó su famoso discurso "I have a dream" y al año
siguiente le dieron el premio Nobel de la Paz. Tras el asesinato, se desató
una especie de guerra racial con incendios, saqueos y tiroteos en un centenar
de ciudades norteamericanas. Hubo 19 muertos y 3.000 detenidos, la mayoría
en Washington DC. La tranquilidad volvió a las calles diez días
después).
Los crímenes
No se sabe si Manson, afectado por los ácidos, se llegó a
creer su propia historia. El caso es que el verano de 1969 transcurría
sin incidentes y algunos acólitos empezaron a mosquearse porque la
guerra racial no acababa de empezar. Entonces, Manson decidió ponerle
remedio, y empezaron las matanzas. Explicó a sus seguidores que debían
simular que los crímenes habían sido cometidos por negros,
dejando objeto personales de las víctimas en barrios de negros y
escribiendo mensajes en las paredes.
El 5 de agosto de 1969
sufrió una gran decepción al tocar en un local donde su música
no tuvo mucho éxito. Parte del público se fue, otros se quedaron
dormidos y otros dijeron que no estaban preparados para esa música.
Era una música un poco dura para la época, con letras sobre
resentimientos y venganzas. Días después, ordenó la
matanza de Sharon Tate.
La noche del
8 de agosto de 1969, Manson envió a Charles ("Tex") Watson,
Susan ("Sadie") Atkins, Patricia ("Katie") Krenwinkel
y Linda Kasabian a matar gente a Cielo Drive, la residencia de Terry Melcher,
el hijo de Doris Day que no había querido hacer una película
con su música. Pero el hijo de la actriz ya no vivía allí,
en febrero le había alquilado la casa al director de cine Roman Polanski
y su esposa, la actriz Sharon Tate. Así que, los miembros de La Familia
se encontraron en la casa con Sharon Tate, embarazada de ocho meses, y unos
amigos, Abigail Folger, Voytek Frykowski y Jay Sebring, y en la entrada
de la vivienda, con el joven Steve Parent, que había ido a visitar
a un trabajador que residía en la casa de invitados. Los mataron
a todos, la casa parecía una carnicería con cuerpos descuartizados
por todas partes. Tenían múltiples heridas de arma blanca
(Voytek, más de cincuenta) y de balas de una pistola del calibre
22. Toda la casa estaba llena de sangre y en las paredes habían escrito
con sangre la palabra "pig".
Tras ver en la tele el
baño de sangre de Cielo Drive, Manson dijo que eran unos inútiles
a los que tenía que enseñarles cómo hacer las cosas.
Así que, decidió que tenía que ir a la siguiente carnicería.
Tres días después, el 11 de agosto, Manson, Charles Watson,
Patricia Krenwinkel y Leslie Van Houten entraron en la vivienda de Leno
y Rosemary LaBianca, un matrimonio de empresarios acaudalados, mientras
Susan Atkins, Linda Kasabian y Clem Grogan les esperaban fuera, en un coche.
Sus cuerpos también aparecieron con múltiples puñaladas.
En el cuerpo de Leno grabaron la palabra "war" y en las paredes
escribieron con sangre: "Death to pigs", "rise" y "Healther
Skelter" (con falta de ortografía incluida).
Días antes de
la matanza de Sharon Tate se había registrado otro suceso similar
en Los Angeles, el asesinato del profesor de música Gary Hinman,
perpetrado el 31 de julio por Bobby Beausoleil, Susan Atkins y Mary Brunner.
A Hinman también lo acuchillaron y en las paredes de su casa escribieron
"political piggy" con su sangre. Susan también hizo un
dibujo en la pared que intentaba representar una uña de pantera,
para que le echaran la culpa a los Panteras Negras, pero nadie se dio cuenta
de lo que era.
Hinman tenía buenas relaciones con el grupo, pero se había
negado a dejarlo todo y formar parte de La Familia. Manson creía
que había heredado una importante cantidad de dinero sobre la que
estaba interesado.
Después de matarlo se fueron a comer pasteles a un bar cercano. El
6 de agosto detuvieron a Bobby Beausoleil por el asesinato. Conducía
una furgoneta de Hinman y todavía llevaba la ropa manchada de sangre.
Los investigadores tardaron
tiempo en darse cuenta de que los tres crímenes estaban relacionados
por una cuestión de competencias y obcecación. La investigación
sobre el asesinato del profesor de música se llevaba en la oficina
del Sheriff, mientras que la de Sharon Tate estaba en manos de la Policía
de Los Angeles. Y éstos estaban empeñados en que se trataba
de un asunto de drogas, a pesar de que Roman Polanski se cansó de
decir que su mujer no consumía drogas, que sólo había
fumado algunas veces Marihuana y que desde que estaba embarazada ni siquiera
fumaba.
Durante los meses siguientes,
la policía entró un par de veces en el rancho de La Familia
Manson porque sospechaban que se dedicaban a robar coches. La segunda vez
rescataron a dos adolescentes que estaban escondidas entre unos arbustos
por miedo a que las matara la Familia. Una era Kitty Lutesinger, de 17 años,
la novia de Beausoleil. La chica les dijo que Charles Manson había
enviado a su novio y a Susan Atkins a pedirle dinero a Hinman y que como
no les dio nada, lo mataron.
Por entonces,
la locuaz Susan Atkins también estaba en la cárcel, porque
la habían detenido en una de las redadas del rancho, y no paraba
de cantar. Contó a sus dos compañeras de celda todas las hazañas
de La Familia. Al principio, las otras reas pensaron que eran fantasías,
pero cuando se convencieron de que era verdad, se lo dijeron a la policía.
Susan explicó que pensaban seguir matando a famosos porque tenía
más repercusión en los medios de comunicación. Dijo
que entre sus siguientes víctimas estaban Elizabeth Taylor, Richard
Burton, Frank Sinatra, Steve McQueen y Tom Jones. Pensaba arrancarle los
ojos a Liz Taylor, cortarle el pene a Richard Burton, despellejar vivo a
Frank Sinatra y degollar a Tom Jones, después de obligarlo a mantener
relaciones sexuales con ella.
Gracias a las historias
de Susan y la de la novia de Beausoleil, los investigadores por fin fueron
capaces de relacionar los tres crímenes. Rodearon el rancho el 1
de diciembre de 1969 y detuvieron a los seguidores de La Familia por las
matanzas de la casa de Sharon Tate, LaBianca y Hinman.
"Charlie
es amor"
En los interrogatorios,
las chicas se limitaban a contestar "Charlie es amor", cuando
les preguntaban por Manson, o "el tiempo no existe", cuando les
pedían fechas, pero en el dormitorio de Sharon Tate había
aparecido una huella de Patricia Krenwinkel.
Durante el juicio, los acólitos intentaron matar a una testigo de
la acusación, una de las chicas de Manson le suministró una
dosis letal de LSD; además, asesinaron al abogado de una de las acusadas,
Leslie Van Houten, porque no seguía la línea de defensa marcada
por Manson, que consistía en que todos eran culpables menos él.
El gurú se declaró inocente, y los demás acusados reconocieron
su participación en los crímenes y le exculparon, negando
incluso que Manson les hubiera enviado a las casas de las víctimas.
Las únicas espabiladas fueron Linda Kasabian y Mary Brummer, que
accedieron a facilitar pruebas contra Manson y la secta a cambio de que
no presentaran cargos contra ellas.
Posteriormente, uno de sus acólitos, Lynette Fromme, fue condenado
por intentar asesinar al presidente Gerald L. Ford en 1975.
Se cree que antes de
que llamaran la atención con el asesinato de Sharon Tate ya habían
matado a más personas, también a ex miembros de la secta y
gente que pasó por el rancho, pero sin dejar mensajes en las paredes.
Manson llegó contar que había matado a 35 personas. Le condenaron
por los asesinatos de Hinman, Sharon Tate y sus amigos, el matrimonio LaBianca
y por matar a un vecino del rancho que se había quejado al dueño
por las actividades de la secta.
Actualmente, Charles Manson es el reo que recibe más cartas en Estados
Unidos y uno de los asesinos en serie más famosos del mundo. Se han
hecho numerosos libros, óperas, películas y documentales sobre
su vida. Los Guns N'Roses tocaron su música y Marilyn Manson le tomó
el apellido.
Polanski se ha pasado
toda la vida desmintiendo teorías truculentas sobre la muerte de
su mujer, que lo único que hizo fue alquilarle la casa a un famoso
que no había querido hacer una película con la música
de Manson. En 2005 condenaron a la revista Vanity
Fair a pagarle 50.000 libras esterlinas por un artículo publicado
en 2002, que decía que el director de cine le había hecho
proposiciones sexuales a una sueca cuando iba al funeral de su esposa.
Campeón de lucha libre mata a su familia
Polémica en EE.UU. por los efectos psicológicos de los esteroides
Juanma.
La policía de Georgia (Estados Unidos) cree que el luchador canadiense
Chris Benoit, de 40 años, una de las estrellas del wrestling americano,
mató en junio a su mujer y a su hijo de siete años antes de
suicidarse en el gimnasio de su casa, ahorcándose con la polea de
un aparato de pesas.
La noticia no
pasaría de ser un triste añadido a la lista de maridos y ex
maridos asesinos, de no ser por varios aspectos que la hacen destacar. En
primer lugar, naturalmente, el hecho de que el presunto asesino y suicida
fuera famoso. Benoit había ganado varios campeonatos a lo largo de
su carrera, y si teclean ustedes en Google su nombre seguido de la palabra
death, les saldrán más de un millón y medio de entradas.
Era un luchador apreciado por el público (casi siempre estuvo en
el bando de los buenos), y el día 25 de junio habría tenido
que poner en juego su título en una gran velada estelar. Al no presentarse
(para entonces, la familia entera estaba muerta), fue sustituido por otro
luchador.
La segunda particularidad es que la noticia de la muerte de la mujer fue
anunciada por un misterioso corresponsal de la Wikipedia catorce horas antes
de que la policía descubriera los cadáveres. Concretamente,
el informador añadió una coletilla al dossier de Benoit en
la Wikipedia, diciendo que no había podido presentarse a la velada
del día 25 por problemas familiares "derivados del fallecimiento
de su mujer Nancy". La policía siguió el rastro informático
de la "noticia" y acabó descubriendo su origen en Connecticut,
a más de 1.000 kilómetros de la residencia de los Benoit en
Georgia. La explicación oficial es que se trató de "una
coincidencia". Por lo visto, la policía no cree que el corresponsal
tenga nada que ver con el crimen-suicidio.
Otro aspecto extraño del caso es que Benoit no mató a su familia
en un arranque momentáneo de furia. La reconstrucción forense
indica que mató a su mujer Nancy el día 22, a su hijo David
el 23 y que por fin se suicidó el 24. ¿A qué se debió
este escalonamiento? ¿Informó a alguien de lo que estaba pasando?
Parece que sí telefoneó para avisar de que no podría
pelear el 25 "por problemas familiares". Esto podría explicar
en parte la improvisación del corresponsal de la Wikipedia.
Por último, un detalle macabro. El niño, de siete años
de edad, tenía marcas de agujas en los brazos, y parece que se deben
a que sus padres le inyectaban hormona del crecimiento porque consideraban
que estaba poco desarrollado. Hay que decir que la difunta Nancy también
estaba metida en el mundo de la lucha libre, donde se la conocía
como "Woman". Antes de casarse con Benoit había estado
casada con otro luchador.
Polémica
sobre la roid rage
El caso ha desatado una tremenda polémica acerca de los presuntos
efectos psicológicos de los esteroides anabolizantes, que los luchadores
de catch consumen a espuertas para desarrollar esos impresionantes cuerpos
de laboratorio. En su caso la cosa se complica porque también toman
carretadas de analgésicos para quitarse los dolores de las costaladas
y retorcimientos que forman parte de su oficio. Según algunos, la
mezcla de ambas sustancias en grandes cantidades no conduce a nada bueno,
y se citan varios casos de luchadores fallecidos por trastornos cardiacos
que podrían haber sido provocados por el consumo masivo de esteroides.
Los efectos psicológicos no están tan claros (parece que en
eso influirían más los analgésicos), pero también
hay que tener en cuenta que las estrellas del wrestling están constantemente
de gira, actuando casi cada día, y muchos de ellos buscan alivio
para el estrés en el alcohol. Como ven, la mezcla química
ya va siendo preocupante. ¿Tuvo algo que ver el caso de los Benoit
con lo que en Estados Unidos llaman roid rage (locura agresiva supuestamente
provocada por los esteroides)?
Mientras tanto, la federación de lucha americana (o empresa de espectáculos,
o como se llame) ha borrado el nombre de Chris Benoit de sus páginas
web, programas informativos, listas de campeones, etc, e incluso censura
lo que dicen los comentaristas en las veladas televisadas, suprimiendo cualquier
alusión a Benoit. Se ha convertido en un nombre maldito.
El
Solitario reaparece en Zamora (y sigue cabreado)
Juanma. El
atracador más buscado de España reapareció el 19 de
mayo en Toro (Zamora), donde atracó una sucursal de la Caja Rural
de Zamora, llevándose un botín de unos 6.000 euros. Como la
cantidad le pareció insuficiente, le disparó un tiro en la
pierna al cajero "para que la próxima vez tuviera más
dinero".
No es la primera vez que El Solitario expresa a tiros su frustración.
Lo mismo hizo el 20 de abril de 2006 en Sarria (Lugo), de donde sólo
pudo llevarse algo más de 800 euros. Los comentaristas criminales
aseguran que el misterioso atracador se ha endurecido desde que mató
a dos guardias civiles en una carretera de Navarra, el 9 de junio de 2004.
"Una vez que has matado, muchas cosas cambian en ti", asegura
un experto.
Los cabreos del
Solitario tienen su explicación. Parece que sólo actúa
cuando anda apurado de dinero, y un botín escaso le obliga a aumentar
la frecuencia de los golpes, con el consiguiente peligro.
La policía calcula que, a lo largo de su carrera, El Solitario ha
robado unos 700.000 euros en una treintena de asaltos a bancos por toda
España. El modo de operar es siempre el mismo. Entra en los bancos
disfrazado con peluca y barba postiza, nunca permanece más de dos
minutos en el local y se lleva únicamente el dinero en efectivo que
el cajero tiene a mano, sin esperar a que le abran cajas fuertes que le
harían perder tiempo. Después huye a pie por la calle y desaparece.
Se supone que aparca su vehículo en calles laterales. Tras el atraco
de Toro la policía estableció rápidamente controles
de carretera, pero sin resultado.
La larga y exitosa carrera del Solitario ha hecho que se multipliquen las
teorías sobre su identidad. Muchos aseguran que es o ha sido miembro
del Ejército (tal vez un suboficial chusquero), basándose
en su frialdad operativa y su dominio de las armas. Otros han creído
descubrir que sigue las rutas ganaderas de la trashumancia, y sugieren que
habría que seguir esa pista. Una opinión muy extendida es
que, si no comete un error garrafal, es posible que un día dé
un golpe sustancioso y desaparezca para siempre. Todo parece indicar que
lleva una vida normal. Podría ser cualquiera. Por su parte, la policía
opina que tarde o temprano cometerá ese error y caerá, pero
que mientras tanto el hombre es cada vez más peligroso, porque le
va cogiendo gusto a disparar.
El punto de inflexión de su carrera tuvo lugar en una carretera próxima
a Castejón (Navarra) el 9 de junio de 2004. Aquel día, dos
guardias civiles aparecieron acribillados a tiros en su coche patrulla.
Todo parecía indicar que pararon un coche para hacer un control y
el conductor los ametralló sin darles tiempo a reaccionar. Al principio,
los asesinatos se atribuyeron a ETA, pero al analizar los proyectiles se
descubrió que coincidían con parte de los empleados en un
tiroteo ocurrido en mayo de 2000 tras un atraco en Vall D'Uxó, donde
murió un policía local. Aquella muerte podría considerarse
"accidental", ya que no fueron sus balas las que abatieron al
policía. Pero el asesinato a sangre fría de los guardias civiles
lo cambió todo. Los tiros pasaron a ser parte habitual de su actuación.
Y va preparado para ellos. Por la corpulencia que muestra en las fotos,
la policía sospecha que lleva un chaleco antibalas debajo de la chaqueta.
En los círculos del hampa, El Solitario es ya un ídolo. Tanto
es así que ya le han salido imitadores que se disfrazan como él
para despistar a la policía. Pero la paradoja del caso es que es
fácil identificarlo cuando está en faena: El Solitario es
el criminal más misterioso de España, pero también
el más fotografiado.
La
policía portuguesa detiene al Atracador Solitario (Adegüelllo,
octubre 2007).
"El
Solitario" vuelve a actuar y hiere a un cajero (Adegüelllo,
mayo 2006).
No puede donar un riñón por estar en una secta
Andrea. En
junio, las autoridades de salud canadienses se han visto obligadas a intervenir
en el caso de Ashwyn Falkingham, un joven australiano de 22 años,
que llegó al país con la intención de donar uno de
sus riñones a una mujer canadiense a la que conoció a través
de un sitio web. El futuro donante pasó todas las entrevistas y pruebas
psicológicas obligatorias en caso de donación entre personas
sin relación familiar, previstas por la legislación canadiense
y el Hospital General de Toronto, pero no contó con que sus padres
iniciarían su propia campaña para impedir que donara un riñón
a una extraña, por lo que el hospital se echó atrás.
Los padres dicen
que desde que su hijo entró a la secta religiosa australiana Jesus
Christians ha cortado toda relación familiar y se encuentra bajo
la influencia mental de su líder, David McKay, y por ello su decisión
de ser donante es producto del lavado de cerebro y no una decisión
libre. Al volver a su país, Ashwyn, quien ya intentó ser donante
hace un año, declaró que sigue decidido a hacerlo y lo intentará
otra vez.
Se cree que la mitad de los miembros de la secta han sido donantes de riñón,
empezando por McKay, quien donó el suyo en Estados Unidos en el año
2003. Pero la secta nómada, con sede en Sidney, no escogió
un buen país en lo que a transplantes se refiere, ya que Australia
prohibe las donaciones de órganos entre personas sin relación
familiar. Aunque sus seguidores dicen que las donaciones son totalmente
altruistas y se hacen como forma de demostrar la entrega al prójimo,
los Jesus Christians ya son conocidos por otras obras. En el año
2000, Roland y Susan Gianstefani, dos miembros de la secta en el Reino Unido,
fueron acusados de raptar a Bobby Kelly, un joven de 16 años que
abandonó sus estudios y familia para irse a vivir con la secta. En
2005, Roland Gianstefani vuelve a ser investigado y procesado en Kenia,
pero esta vez por el secuestro o retención ilegal de una periodista
y su hijo de 7 años. Por otro lado, el líder de la secta no
es un novato en este mundo ya que pasó 18 años con los Niños
de Dios, un grupo que supuestamente permite el abuso sexual de menores,
antes de fundar su propia secta. Hasta la fecha, se cree que los Jesus Christians
se han limitado a quedarse con el dinero de sus acólitos, aislarlos
de sus familias y amigos y donar sus órganos.
Reclamando
a cuchilladas
Manolo
Poy. Los electrodomésticos
le daban dolor de cabeza, quiso reclamar y, como no le hacían el
caso que él quería, intentó arreglarlo a puñaladas
y acabó con las piernas llenas de balazos.
A los agentes que estaban de guardia el lunes 18 de junio en el cuartelillo
de la policía local de Mollerusa, en Barcelona, se les quedó
cara de pasmo cuando vieron entrar a un ciudadano de color, concretamente
negro, de dos metros de alto, hecho una furia y gritando contra una marca
de electrodomésticos. El hombre, originario de Malí, quería
que los guardias le firmaran un certificado que demostrase que los electrodomésticos
de la dichosa marca (que no ha trascendido) producían dolor de cabeza.
Faltos de conocimientos suficientes en la materia, los policías trataron
de explicarle que no podían hacer tal cosa, lo que el gigantesco
reclamador se tomó muy a mal y esgrimió un cuchillo de grandes
proporciones. En esas llegó una patrulla de los Mossos de EsQuadra
y el cuartelillo se convirtió en una versión catalana del
camarote de los Marx hasta que uno de los agentes decidió darle un
toque de demencia generalizada y vació entre la concurrencia un spray
antidefensa, logrando echar a todo el mundo a la calle.
El indignado demandante decidió subir de tono su reivindicación
y se abalanzó cuchillo en ristre contra uno de los policía
autonómicos que le descerrajó un tiro en la pierna, lo que
no paró la mortífera carga, hasta que la compañera
de patrulla del Mosso le disparó de nuevo, y en la misma pierna,
lo que le dejó reducido, indignado y sin solución a su dolor
de cabeza.
La
secta Mungiki se apunta a la política
Andrea. En
lo que constituye un episodio más de la lucha de las autoridades
de Kenia contra la secta Mungiki, la policía ha arrestado en junio
a 2.464 de sus seguidores por los macabros asesinatos de doce personas en
los últimos tres meses. La mitad de las víctimas sufrieron
la decapitación y desmembramiento en lo que se cree fue una forma
de venganza, por su supuesta colaboración con la policía,
que sirve de advertencia a otros miembros de la secta. Estos crímenes
también pueden considerarse un ataque contra el gobierno, al que
han acusado de incumplir sus promesas de crear empleos, ya que entre las
víctimas está el representante del gobierno para la región
de Kangema y su familia, quienes fueron asesinados de un tiro en la nuca
con un estilo propio de las ejecuciones.
La secta Mungiki
("multitud" en el idioma de la tribu kikuyu), que fue prohibida
hace tres años por el gobierno de Kenia, asegura tener infiltrados
en las instituciones, fábricas, escuelas y fuerzas armadas. En los
últimos días sus seguidores han distribuido unos panfletos
en los suburbios de Nairobi anunciando la realización de un acto
en donde harán públicos los nombres de altos cargos del gobierno
y el ejército que pertenecen a la secta, por lo que se teme que Mungiki
esté planeando atacar durante las elecciones generales, a realizarse
en diciembre próximo, en las que el presidente Mwai Kibaki intentará
conseguir un segundo mandato.
Y es que la secta
que promueve la circuncisión femenina y los juramentos sagrados y
que asegura tener más de un millón de seguidores parece estar
intentado dar el salto a la política desde sus orígenes en
la extorsión al transporte por carretera, los robos, asesinatos y
otras actividades nada edificantes; incluso se ha advertido en sus miembros
un cambio: desde el pelo estilo Bob Marley, esnifar tabaco en público
y la ropa desordenada, al traje y pelo corto. Mungiki tiene mucho poder
en los suburbios pobres, especialmente Mathare, donde proporciona conexiones
ilegales de luz y agua a las chabolas, al tiempo que cobra a sus habitantes
por el acceso a los baños públicos y por "servicios de
protección" durante las noches. La principal fuente de ingresos
de la secta es la extorsión al transporte interurbano, que asegura
asesinando a los que se niegan a pagar. Sus líderes se mueven continuamente,
por lo que los intentos de la policía de capturarlos han fracasado
hasta ahora; también se cree que tienen células listas para
actuar en todo el país.
El presidente Kibaki ha prometido protección a quienes ayuden a capturar
a los cabecillas de esta secta que, según algunos expertos, utilizan
la fachada de la religión, pero en realidad es un grupo armado más
de los que abundan en África.
Secta nativa enseña
a matar (Adegüello, marzo
2006).
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