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bimensual de crítica de crímenes / número 15- mayo 2006
Candidato
al premio Moriarty
"El
Solitario" vuelve a actuar y hiere a un cajero
Juanma.
Aprovechamos la campaña policial para presentar la candidatura
española al infame y prestigioso Premio Moriarty, a nombre de...
nuestro candidato no tiene nombre. La Policía y la prensa le llaman
"El Solitario" por su manera de trabajar, y es el atracador
(y asesino) más buscado de España. Lleva ocho años
actuando, en los que ha perpetrado unos 30 atracos a bancos, y se calcula
que ha obtenido un botín conjunto de más de medio millón
de euros. Se le acusa además de las muertes de un policía
en Vall d´Uxó (Castellón) en el año 2000 y
dos guardias civiles en una carretera Navarra, en 2004.
Nadie sabe quién
es ni qué aspecto tiene. "Podría ser el vecino de al
lado", dice un portavoz policial. Se supone que vive cómoda
y discretamente del producto de sus atracos y entra en acción cuando
se le acaba el dinero. Antes del último golpe, en abril, en Sarria
(Lugo), llevaba dos años sin actuar, por lo que es posible que ande
un poco justo de fondos, y esto puede explicar su enfado cuando el cajero
del banco sólo le entregó unos 800 euros, lo que le impulsó
a disparar contra el empleado, hiriéndole en una pierna. También
es posible que ande un poco desentrenado, porque parece que una mujer le
vio en la calle, ya sin su disfraz, lo que tal vez permita elaborar por
primera vez un retrato- robot.
Nuestro hombre trabaja siempre solo (de ahí su apodo), disfrazado
con peluca y barba postiza. Dada la corpulencia que presenta en las imágenes
grabadas por las cámaras de los bancos, se sospecha que también
lleva puesto un chaleco antibalas. Es sumamente frío y eficaz, y
no vacila en disparar cuando se ve en peligro. Así murió el
policía de Vall d'Uxó. Se cree que los dos guardias civiles
de Navarra pararon su coche por alguna cuestión de tráfico
y él los abatió a sangre fría. El arma empleada era
la misma en los dos casos.
Esta última vez ha salido chasqueado, por lo que se teme que vuelva
a golpear dentro de poco.
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