www.adeguello.net / revista bimensual de crítica de crímenes / número 13- enero 2006

Estafas, timos y falsificaciones

Las inmobiliarias de pega

Esther. Primero montaban una agencia inmobiliaria, después alquilaban una vivienda que ponían a la venta a precios interesantes y cuando cobraban unas cuantas señales por la compra, se largaban antes de firmar los contratos. La policía argentina busca a dos personas de 48 y 50 años acusadas de una veintena de estafas cometidas con este sistema entre marzo y noviembre de 2005. Dicen que los delincuentes tienen quince órdenes de captura nacionales e internacionales pendientes.
Al parecer, los compradores pagaban entre 1700 y 2500 euros en concepto de señal y se comprometían a entregar el dinero restante y formalizar el contrato de compra en 30 días. Además, a los que querían que les ayudaran a gestionar uno de los préstamos hipotecarios que ofrecían a un bajo interés, les cobraban unos 140 euros extra.

La casa de Boadilla del Monte
Por otro lado, la guardia civil española detuvo en Boadilla del Monte (Madrid) a cinco personas, de entre 26 y 54 años, acusadas de dedicarse a la venta fraudulenta de viviendas que no eran suyas. Los detenidos falsificaban supuestamente los documentos de identidad de los dueños de viviendas y la documentación acreditativa de la propiedad. Después contrataban a drogadictos, a los que vestían con ropa de marca, para que acudieran al notario a firmar la venta de la propiedad, según la guardia civil. En el caso de un inmueble de Boadilla que se cree vendieron por este procedimiento, se les acusa de haber pedido también tres créditos por valor de 200.000 euros, avalados con esta propiedad, y de venderla posteriormente por 350.000 euros. Los investigadores dijeron que cuando les detuvieron estaban a punto de hacer lo mismo con otro inmueble de la capital. Se les acusa de estafa y falsificación de documento público y mercantil.
Mucho más modesto ha sido un joven de 26 años de Alboraia (Valencia) que, al parecer, se dedicaba a alquilar un piso y a cobrar una fianza por su alquiler. El chico ponía anuncios en internet, se lo enseñaba a inmigrantes (tal vez pensando que no le denunciarían), firmaba un contrato de alquiler y les cobraba una señal de 600 euros, según los investigadores. Se cree que después mandaba un mensaje de móvil a las víctimas, en el que les comunicaba que la vienda no era suya y que lo había hecho porque tenía problemas. De momento, le acusan de cinco estafas similares.





Medio centenar de cartas a Papá Noel

Andrea.
La empresa de correos de Chile ha demandado a una mujer en diciembre por intentar estafar al símbolo de la navidad. La costumbre de que personas en apuros envien cartas a Papá Noel a la central de correos pidiendo regalos y favores para la Navidad, con la esperanza de que personas que buscan hacer la buena obra del año se los concedan, fue aprovechada por una mujer que envió más de 500 cartas, en las que contaba la historia de una vecina, cuyo marido se suicidó, para causar pena. Parece que el cuento surtió efecto, pues poco después los vecinos de la acusada empezaron a ver como la familia recibía distintos presentes. Uno de sus hijos la defiende diciendo que ha repartido los regalos recibidos entre los niños del barrio. Por su parte, la portavoz de la empresa dice que no tienen tiempo de revisar las 40.000 cartas que les llegan cada año y evitar así la acción de listillos.




Estafan a los delincuentes sexuales de Indiana

Esther.
Mattew Buescher, de 35 años, ha sido detenido en Arkansas (EEUU) por estafar más de 20.000 dólares USA a delincuentes sexuales de Indiana. Al parecer, encontró sus datos en internet, en la página encargada de avisar a los vecinos sobre los peligros que pueden suponer estos individuos para el vecindario. En diciembre e pararon en un control de tráfico y encontraron en su coche información económica sobre varias persona. Buescher dijo que se había gastado el dinero en un casino. La policía dice que conseguía el dinero por medio de tarjetas de crédito y devoluciones de impuestos de las víctimas.
La principal ventaja que tiene el sistema ideado supuestamente por Buescher es que si la víctima está en la cárcel cumpliendo condena tardará un tiempo en enterarse de que sus cuentas están en números rojos.





Formularios a plazo chilenos

Andrea.
Un ciudadano ucraniano residente en Chile ha sido detenido en diciembre por sospechas de formar parte de una banda dedicada al fraude bancario. A Maxin Sukhomlinov lo acusan por participar en una estafa de 3000 millones de pesos chilenos. El método utilizado era obtener formularios a plazo de bancos de modo fraudulento, después colocaban estos documentos en depósitos a plazo y se quedaban con las ganancias de los legítimos dueños. La policía espera que el detenido ayude a capturar al resto de la banda.